Comenzaba el otoño de 2006..., por aquella época nuestras ilusiones comenzaron a ser mayores, al darnos cuenta de que por fín íbamos a hacer algo imporante por llegar a tener un bebé.
Llevábamos ya 6 años de búsqueda, y muchas pruebas y tratamientos negativos, hormonas, pinchazos, dinero..., todo perdido, pero en ese momento sentíamos que era lo que teníamos que hacer, era nuestra primera Fecundación In Vitro (FIV) y el miedo a lo desconocido no nos impedía sentirnos realmente felices por dar ese gran paso.
No fue facil, fueron muchos pinchazos, muchas ecografías, muchas idas y venidas a la clínica, una punción dificil, y muchas horas de angustias esperando una llamada..., y esa llamada llegó, nos lo confirmaron...teníamos 2 embriones esperando que se desarrollaban con normalidad...
Fuimos felices.., muy felices, algo nuestro, algo de los dos estaba creciendo, y en un par de dias, me los trasladarían para que crecieran dentro de mí.
Y así fue..., allí estaban, ese pequeño puntito blanco de la ecografía me decía que ahí estaban alojados mis dos pequeños embrioncillos, ahora solo había que esperar que se agarragan fuerte a su mami..., y así fue, ocurrió el milagro..., solo uno, mi campeón, llegó a agarrarse a mí...ESTABA EMBARAZADA!!! No me lo podía creer, lloré de alegría, de emoción, de tanto sufrimiento a mis espaldas... 
Pero eso fue todo..., lo único que me queda de esos dias, de que mi sueño en ese momento se pudo cumplir ,son éstas tres fotografías, las de mis embris, la de cómo se alojaban dentro de mí, y éste test..., donde puede comprobar que se podía conseguir ver esa segunda rayita que tanto tiempo llevaba buscando.
Fueron momentos duros, tristes, apenas estaba de 7 -8 semanas cuando todo acabó..., cuando pasé de la felicidad más absoluta a la desolación..., cuando saqué toda la fuerza de mi interior para decirme a mí misma que seguiría intentándolo.
